La crisis migratoria en Ceuta ha dejado imágenes que plasman con crudeza el drama que viven muchas de estas personas. Una de ellas es la de Luna, voluntaria de la Cruz Roja, abrazando a Abdou, un joven senegalés que había cruzado a nado.
Por el momento solo se había conocido la historia de ella, que si bien ha sido alabada por su gesto de humanidad, también se ha convertido en víctima de numerosos mensajes de odio.
Ahora, gracias a una reportera de Radio Televisión Española, se ha logrado conocer la otra parte de la historia: la del joven senegalés desconsolado entre los brazos de Luna. Su nombre es Abdou, tiene 27 años y actualmente se encuentra en Casablanca.
Gracias a RTVE Luna y Abdou han podido reencontrarse a través de una videollamada. En ella, el senegalés ha aprovechado para agradecerle lo que hizo por él: "Jamás podré olvidar su gesto". Asimismo, no comprende por qué la voluntaria se ha convertido en el epicentro de ataques machistas y xenófobos. "Ella solo hizo su trabajo. Me reconfortó, me ayudó, fue un gesto humano", dice.
Llevaba cuatro años viviendo en Marruecos y no era la primera vez que intentaba cruzar la frontera junto a su hermano. Por ello, cuando la semana pasada se enteraba de que el reino alauita abría sus fronteras no lo dudaron. Así, emprendieron su camino desde Tánger a Castillejos, en la frontera con Ceuta, durante toda una noche. "Desde las 7 de la tarde a las 6 de la mañana del día siguiente", explica.
Desde el día de aquel día Abdou no sabe nada de su hermano. De hecho, el desconsuelo que irradia aquella imagen estaba motivado por el estado de inconsciencia en el que llegó su hermano a la playa. No sabe nada de él y por ello, le ha pedido a Luna que averigüe si está vivo.