Los refranes en castellano, aunque tienen mucha tradición, pueden enseñarnos cosas que jamás olvidaremos y una lección de vida
Los distintos refranes en castellano tiene una fama de conservación y tradición. En algunos momentos los dichos se han ganado esa fama, como algunos que veremos aquí. En otras, trata principios y lecciones de vida que pueden enseñarnos muchas cosas y hacer que nos planteemos las cosas que vamos a hacer o haremos.
Ahora vamos a explicar el significado de estos refranes en castellano:
Este refrán te enseña que no debes de hacer cosas para enfadar a la gente, sabiendo que lo puede hacer; porque lo que viene después con esas personas puede ser mucho peor.
Hoy en día el ser multidisciplinar está a la orden. Y eso nos da a entender que podemos hacer varias tareas al mismo tiempo y todas bien. Sin embargo, este refrán te señala que cuanto más cosas abarcas, peores resultados obtienes de ellas.
Señala que el tiempo puede curarlo todo, menos las enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer que se asocian a la vejez, que no tienen cura.
A nadie, absolutamente a nadie, le afecta comerse un dulce de vez en cuando. Eso sí, sin abusar de ellos.
Quizá un pensamiento negativo te aventure algo que pueda llegar a pasar. Cuidado con la intuición, puede estar aventurándonos algo.
Muchas mujeres han sentenciado este dicho por su carácter competitivo entre ellas mismas, el cual no debería de existir. Este refrán indica que las chicas guapas pueden mantener muchas relaciones, pero las menos agraciadas encuentran antes alguien bueno que se quede con ellas.
Más vale no hacer algo que pueda salir mal, que hacerlo y que pase algo malo.
Cuando sentimos hambre no tomamos buenas decisiones.
Hay que ser una persona altruista y no mirar lo que tiene los demás.
Aunque el sector masculino no esté de acuerdo, una investigación de la Universidad de Rutgers confirmaba que, para el placer sexual de la mujer, el pene masculino si es más grande, es mejor. Sin embargo, no es necesario para lograr el orgasmo femenino.
En las situaciones más desafortunadas o menos buenas, los más hábiles encuentran tajada.
Más vale tener lo que tienes, que no muchas cosas y que sean malas.
Las personas inteligentes o hábiles saben encontrar dónde está la dificultad en otra persona.
Lo que los demás hagan, a ti que no te afecte. Aunque los demás corran, tu no debes de agobiarte por ello, ni sentirte frustrado. Lo que hacen los demás, no es lo que tú debes hacer.