Antes de la crisis, 900.000 personas mayores venían beneficiándose cada año de los programas de Turismo Social y de Termalismo organizados por el IMSERSO. El Gobierno suspendió estos viajes en marzo de 2020 por la crisis del coronavirus. Más tarde, tomó la decisión de suspender definitivamente ambos programas mientras la situación sanitaria no permitiese su reanudación.
La ministra ha dicho que son conscientes de "la importancia económica que tiene esta actividad para el mantenimiento de muchos puestos de trabajo en el sector turístico", aunque ha añadido que deben mantener "el principio que ha regido hasta ahora todas las decisiones: el de proteger la vida de las personas por encima de todo".
Según explica Belarra, la campaña estará supeditada bajo los criterios de las autoridades sanitarias. Entre los factores a considerar se encuentran: el fin del estado de alarma, el desarrollo del programa de vacunación frente a la COVID-19, la comprobación del mantenimiento de la inmunidad en el tiempo ...