La Policía Local de Lorca ha identificado a una persona que se encontraba arrojando enseres y deshechos en la vía pública junto unos contenedores de basura en la carretera de Águilas, según ha informado el concejal de Seguridad Ciudadana, José Luis Ruiz Guillén.
Los agentes que se encontraban realizando vigilancia ordinaria en la pedanía de Purias observaron en la carretera de Águilas, RM-621, en la intersección con Camino de la Torre, a una persona que se encontraba vertiendo de un remolque enseres y deshechos en la vía pública, y los estaba depositando junto unos contenedores de basura.
Los agentes identificaron e informaron a esta persona que sería propuesto para sanción por incumplimiento de la Ordenanza Municipal de Limpieza Viaria, Recogida de Residuos Sólidos y Tratamiento de los mismos, y se le ordenó la recogida de lo depositado, a lo que accedió.
Por otro lado, agentes de la Policía Local también llevaban a cabo otra actuación estos días pasados después de recibir el aviso desde la Estación de Autobuses de Lorca alertando que una persona se estaba dedicando a realizar funciones de taxi ilegal, captando viajeros a la llegada de los autobuses y trenes.
Por este motivo se estableció un servicio de vigilancia y se localizó a esta persona, con domicilio en Puerto Lumbreras, a la que se observó contactando con otra persona que acababa de bajarse de un autobús portando una maleta y un bolso de mano y, tras una breve conversación, ambas personas fueron al vehículo estacionado para introducir las maletas.
Una vez el vehículo se puso en marcha fue interceptado por una patrulla de Policía Local, que identificó al conductor, así como al pasajero, quien manifestó que el conductor del vehículo le había ofrecido llevarlo en su vehículo hasta Totana por un importe de 10 euros.
Además, el Grupo de Intervención de Seguridad Ciudadana (GISC) en su sección canina intervino este domingo al tener conocimiento de que cerca de la calle Empedrada se encontraba un perro de raza American Stanford, en la terraza de uno de los edificios de la zona donde vive durante años en muy malas condiciones, sin comida y apenas agua, sin abrigo a las inclemencias del tiempo, e insalubridad, cuyo propietario se acercaba a este lugar una vez al mes y mientras tanto era penosamente atendido por la falta de medios, por los propios moradores de dicho edificio.
Personados los agentes en este lugar comprobaron dicha situación, observando que la perra de avanzada edad, 13 años, se encontraba en condiciones lamentables tanto físicas como en las del lugar en el que residía. Por lo que se pusieron en contacto con el propietario para que se personara con dicho animal en dependencias policiales.
Una vez allí se le retiró la propiedad del animal, que se entregó cedido a la protectora Olimpo, que de inmediato se hizo cargo de su acogida y cuidados, así como su asistencia sanitaria para su recuperación, al igual que el hasta entonces propietario fue propuesto para las sanciones correspondientes a su dueño.