Se trataba de un hombre y una mujer de 27 y 40 años que ocupaban viviendas embargadas para posteriormente alquilarlos a inmigrantes por plazas
La Policía Nacional comenzó la investigación en los domicilios donde se evidenció enganches ilegales de luz y agua y, donde encontraron a nueve personas que vivían agolpadas con una situación irregular y que aseguraron pagar por vivir en esa condiciones.
Los agentes ha logrado ubicar hasta cuatro inmuebles que habían sido utilizados por la organización en el mismo municipio de Mula. Los cabecillas eran un hombre y una mujer de 27 y 40 años que han sido detenidos por ocupar viviendas que habilitaban con enganches de agua y luz, y que posteriormente alquilaban a inmigrantes de origen magrebí con dificultades económicas, que en la mayoría de los casos, se encontraban en una situación irregular en el país y a quienes les cobraban entre 50 y los 100 euros al mes por una plaza en el domicilio.
Cuando entraban a vivir, los inquilinos eran instruidos por la organización, que tenían instrucciones claras para sus víctimas con respecto a lo que decir a la policía, y les amenazaban con entrar en la casa mientras ellos trabajaban para sacar sus pertenencias y cambiar la cerradura si les vinculaban con el alquiler del inmueble.
Finalmente, la operación ha culminado con la desarticulación total de la organización criminal y la detención de los dos líderes que han sido acusados de los delitos de favorecimiento a la inmigración ilegal, amenazas, coacciones, usurpación de bien inmueble, defraudación de fluido eléctrico, delito de estafa, allanamiento de morada y pertenencia a grupo criminal.