Marido y mujer plantan 2 millones de árboles en 20 años, devolviendo la vida a todo un bosque.
lo que está sucediendo con la flora y la fauna de nuestro planeta es alarmante; las consecuencias de la contaminación ambiental y el uso de gases de efecto invernadero están llevando a una progresiva desertificación de algunas de las zonas más verdes de nuestra Tierra; ¿sabía usted que, según una estimación de la FAO, se han perdido más de 129 millones de hectáreas de bosques, equivalentes al tamaño de Sudáfrica, desde 1990?
A estas noticias preocupantes, sin embargo, hay quienes reaccionan con tenacidad, originalidad y esperanza hacia un futuro más verde y mejor.
El conocido fotógrafo brasileño Sebastián Salgado y su esposa Lelia Deluiz Wanik Salgado han decidido invertir en la reforestación de una de las áreas verdes más queridas por la pareja con resultados ejemplares e increíbles. En los años 90, tras regresar agotado de Ruanda devastado por la guerra civil, Salgado regresa a su hogar original en Brasil, situado en una exuberante selva tropical, para hacer un triste descubrimiento: la rica fauna se iba agotando progresivamente, dejando espacio para zonas completamente estériles: sólo el 0,5% de la tierra estaba poblada de árboles.
Sin embargo, la decisión de su esposa devolvió la esperanza a Salgado: intentar plantar nuevos arbustos en la zona de la selva preexistente, y fue sólo gracias a la intuición de Lelia que poco a poco gran parte de la fauna animal que poblaba la zona verde comenzó a volver, desde los insectos a los pájaros, hasta los peces en los arroyos.
En 2001, la pareja Salgado creó la Fundación Instituto Terra para este fin, que desde su actividad ha plantado más de 2 millones de árboles nativos en la tierra, trayendo al área de Brasil alrededor de 172 especies de aves, 33 especies de mamíferos, 293 especies de plantas, 15 especies de reptiles y 15 especies de anfibios: ¡un verdadero ecosistema reconstruido desde cero!
Ahora, en ese rincón del mundo querido por el fotógrafo de renombre internacional y su esposa, la fauna original ha regresado, y donde antes había un silencio mortal ahora hay una melodía de llamadas de pájaros e insectos zumbando alrededor de los árboles que la pueblan de nuevo.
Un modelo, el de la pareja Salgado y la organización que ellos fundaron, que ha inspirado en los años siguientes a su acción a millones de personas en todo el mundo, demostrando así que con la actitud correcta nada es imposible para salvar nuestro precioso planeta Tierra. Es suficiente para amarlo.
